Desde lo más alto, un pájaro solitario observa y canta.
Pero canta tan suavemente, que sus harmonías philharmónicas resuenan en silencio, como las altas esferas que constituyen su única compañía.
Su ausencia de color lo hace invisible a los ojos más triviales; su pico, siempre al aire, sin dejar de cantar, divulga los secretos más celosamente guardados.
¿Los quieres conocer? Escucha...